lunes, 22 de febrero de 2010

Crónicas de un Viaje al Oeste Americano. por ICEMAN

Inicio estas crónicas con una pregunta para que reflexionéis mientras leéis esta breve historia sobre nuestro viaje a USA. Pagarías 500 $ por jugar al golf?

Aterrizamos el viernes en Los Ángeles con una lluvia más propia de Londres que de la soleada California. Las previsiones para el día siguiente seguían siendo de mal tiempo con intervalos de sol a partir del medio día, con lo cual vimos nuestros planes de jugar al golf truncados, y como no hay mal que por bien no venga, decidimos irnos a West Hollywood a cenar y tomar unas copas.

Al día siguiente hacia las 11:30, bajo una ligera lluvia, decidimos acercarnos al Riviera Country Club en Pacific Palisades, que se encontraba a una media hora de camino, donde se estaba disputando el campeonato Northem Trust Open de la PGA con todos los cracks del circuito Norte americano. Todos menos Tiger !!

Todo improvisado y hecho. Llegamos a la puerta del Riviera y nos encontramos a un tipo que nos vendió las entradas por 35$ y a continuación los residentes de las casas vecinas nos ofrecieron los aparcamientos de sus casas para aparcar a 50 metros de la entrada. No está mal!! En menos de 10 minutos estábamos en el Tee del Hoyo 1 esperando la partida de Mickelson, Els y Snedeker. Hoyo espectacular, como casi todos en este coliseo del golf. Un par 4 con salida en alto y un desnivel de unos 15 metros hasta la calle. Un militar anunciaba las salidas con la solemnidad característica de estos eventos en USA, mostrando su respeto a la bandera y a la madre patria. Quizá deberíamos de aprender algo de ellos!

Que voy a decir de los golpes que no sepáis. Seguimos la partida hasta el hoyo 8 y a continuación esperamos la partida de Ricky Barnes, Anthony Kim y Rio Ishikawa. La afluencia de público era bastante importante y todos los greenes y Tees estaban repletos de espectadores. Os envío unas fotos del hoyo 11 del Riviera con la partida de Mickelson a punto de salir. Par 4, y con el driver directos a green.





Al día siguiente, bajo un sol espectacular, nos dirigimos al sur al Trump Nacional Golf Club junto al Océano Pacífico. 250$ green fee (con buggy incluido) +100$ de alquiler de palos. Las maderas eran todo el juego de las R9 y te regalan 6 bolas de golf!!!

Un campo tipo links, sin árboles, con las calles muy movidas y con viento del océano. Todos los hoyos con el Pacífico como fondo. La hierva de las calles en su punto de perfección. Un campo muy difícil (para mi), sin escapes en las calles. O vas a calle o vas a calle. Resultó una auténtica pesadilla terminar el campo porque casi nos quedamos sin bolas. Sin comentarios sobre el resultado!!

Después de esta experiencia, el lunes teníamos planeado ir a jugar en el campo sur de Torrey Pines Golf Club en LA JOLLA (San Diego) pero estaba un poco lejos, a dos hora y media de coche, que en los Angeles pueden llegar a ser cuatro horas, y teniendo en cuenta que esa noche teníamos que ir a un partido de los Lakers en el Stapples center decidimos jugar en Pellican Hills en Newport Beach.

El cambio de planes no salió nada mal. El campo de Pellican Hills también está ubicado en una ladera a orillas del Pacífico rodeado de pinos, un aspecto muy familiar a lo que estamos acostumbrados!!! O eso quisiéramos!!

El pack completo cuesta 470 $ que incluye buggy, juego de palos y Caddy (y dos cajas de bolas). Luego hablaremos de la experiencia con el Caddy. El campo está dentro de una urbanización donde el resort-hotel-casa club costó 1000,000,000 $, en palabras, mil millones de dólares.

Cuando llegamos, los buggys estaban preparados con los palos y la nevera a tope, y nuestro caddy “Eric” nos estaba esperando. La verdad es que acojona!! El caddy nos coge unos palos y nos los lleva al campo de prácticas. Ahí se queda observando nuestra inmejorable técnica. Después de unos minutos de observación “A que hora decís que tenéis que iros al partido de los Lakers?” pregunta Eric. Pienso que fue una pequeña alusión a que no teníamos el nivel adecuado para completar el campo en cuatro horas y media.

Nos dirigimos entre colinas al Tee 1, y mi primera bola se fue a carajo!! Es decir, al barranco. A continuación, calles impolutas y más bolas perdidas. “ Que leches estoy haciendo mal?” Le pregunto al caddy. “Demasiado desplazamiento lateral” A partir de ese punto empecé a darle bien.

Un campo con hoyos espectaculares, vistas espectaculares y una orografía muy divertida. Desniveles, salidas en alto, calles anchas, y greenes de primera. Como os podéis imaginar allí no está permitido jugar sin buggy, ni sin caddy. Y volviendo al tema del caddy, básicamente el juego se reduce a hacer el swing perfecto, porque el resto lo hace el caddy. En cada hoyo la misma frase de inicio: “430 yards, drivers allowed, keep left” y en los siguientes golpes te mide la distancia, te selecciona el palo, te lo limpia y te dice donde apuntar. En el green tanto de lo mismo. También nos hizo de guía turístico cuando le preguntábamos “que hotel es ese?”, “No, no es un hotel, es la casa del propietario del banco Wells Fargo, y esa la de Kobe Bryant!”

Un día fantástico, para no olvidar.






Pau nos invitó a ver el partido de los Lakers contra los San Antonio Spurs en unos asientos de primera. El partido de los Lakers empezaba a las 7:30 y llegamos a las 7:45. Nos sentimos como en casa con Jack Nicolson, Eva Longoria, y otros personajillos que no recuerdo el nombre. Al terminar el partido nos invitaron al “familly room” que es donde los invitados de los jugadores les esperan al terminar. Allí acudió Pau a saludarnos. Un buen tío y un buen partido, ganaron los Lakers.





Nuestro periplo golfístico continua en Las Vegas entre partida y partida de Black Jack. Decidimos hospedarnos en el Bellagio. Buena elección!! Aquí fue donde el golf empezó a pasar a un segundo plano, demasiadas distracciones.

Entrando directamente en materia, el apogeo de nuestro viaje fue la partida en Shadow Creek en Las Vegas. A las 11:15 nos recoge una limosine en la puerta del hotel. Tee time a las 12:15. Las Vegas es un oasis de lujuria en medio de un desierto. En 20 minutos entramos en Shadow Creek Golf Club. Adiós al desierto y bienvenido al lago de Como. Colinas repletas de pinos y vegetación, agua por todas partes. Cuando llegamos a la casa club hay dos personas esperándonos, el Caddy Master y nuestro Caddy “Muss”.Nos invitan a entrar directamente al vestuario. Un salón con sofás, televisión y taquillas donde se pueden leer nombres como Arnold Schwarzenegger. Bandejas de fruta, chocolate, medicinas, jabones, etc, etc. Nos preguntan si necesitamos zapatos de golf.

Green Fee 500$ con todo incluido, como Pellican hills. Repetimos la rutina, unas bolitas en el campo de práctica espectacular y a jugar. Tee 1: “Esta hierva es de verdad o sintética?” Brutal, calles de hierva totalmente homogénea, sin cambio de tonalidades y cortada al milímetro. Creo que la calles eran simplemente greenes con el pelo más largo.
No hay carteles señalando los hoyos, no hay indicaciones de dirección para llegar a los hoyos, ni indicación de longitud, ni handicap, ni nada. Solo en la tarjeta puedes leer la longitud de los hoyos. Tees de salida, tres por hoyo, Champ tees, Back Tees, Regular Tees con una ogintud total de 6626 yardas desde Regular y 7560 desde Champs. Para que quieres carteles si llevas caddy? Hay que revolcarse en este hierva para comprobar que es real! Y solo 4 partidas en todo el campo.

Simplemente espectacular. Ahí van unas fotos de los hoyos más emblemáticos de Shadow Creek.




Espero que reflexionéis sobre la pregunta del principio. Vale la pena pagar 500$ por jugar al golf en estos campos? Lo mejor es que te inviten a jugar, como a nosotros y así seguro que vale la pena.

Un saludo todos.
Iceman

lunes, 1 de febrero de 2010

4ª JORNADA


4ª Jornada disputada en Alicante Golf un campo moderno, equilibrado, y diseñado por Severiano Ballesteros con un par 72, con seis pares 3, seis pares 4 y seis pares 5 que con la gran abundancia de agua y las edificaciones caracteriza al campo a la vez que nos dificultó considerablemente su recorrido, aún siendo llano, descansado y en el que todos los hoyos permiten ver el green, nos obligaba a levantar la bola para llegar a este, dado que si no era agua era bunker el que nos estaba esperando para complicarnos el hoyo, para cuándo llegáramos ,eran esos putts que nos pasamos de rosca por su rapidez,pero todo esto no fue muy complicado para nuestro campeón de la jornada D.Andrés Pomares que con 41 puntos destacados, logró una merecida victoria seguido de D.Adrián Hernandez con 37 puntos. Para categoría femenina fue para Xiana Ulloa 33 puntos, que desde aquí pido a todas esas chicas que se estan poniendo las pilas que participen en el próximo torneo, así como dar la bienvenida a dos nuevas incorporaciones formadas por padre e hijo D.Javier Tobías y Natxo Tobías, a todos enhorabuena.